Weltec Biopower, compañía alemana especialista en biogás, está construyendo junto a otros colaboradores, una instalación de biometano para la explotación de vacas lecheras Torre Santamaría, ubicada en Vallfogona de Balaguer, Lérida.

Desde la puesta en marcha de la primera instalación de biogás de 250 kilovatios en 2011, esta empresa familiar catalana se abastece de energía exclusivamente gracias a sus propios residuos.

La inversión en esta nueva instalación de biometano es de algo más de cuatro millones de euros y una cuarta parte de este importe se ha dedicado a la modernización de la infraestructura existente y de la instalación de biogás. Esta empresa, la segunda productora de leche en Cataluña, ha podido permitirse esta inversión, porque la venta del biometano estaba ya contractualmente garantizada con antelación. Este gas ecológico se comercializa a través de una empresa de servicios energéticos como combustible respetuoso con el medio ambiente.

«Consideramos la instalación como una inversión en el medio ambiente. Con ella reducimos casi a cero nuestras propias emisiones con efecto invernadero y logramos incluso ingresos adicionales con el biometano», explica Juan Bautista Pons Torrades, administrador y propietario de Torre Santamaría.

En esa ubicación se generan unas 60.000 toneladas de material apto para la producción de biogás. La estructura del substrato está formada en un 90% por el estiércol licuado de los animales. Al fermentador llega también el material entremezclado de paja triturada y restos de ensilaje.

Para una fermentación completa de los materiales de entrada, Weltec está instalando dos fermentadores de acero inoxidable adicionales. Con 6,30 m de altura y 26,87 metros de diámetro, permiten una capacidad de 3.573 metros cúbicos.

«Una vez procesado el biogás allí generado, Torre Santamaría suministra 300 metros cúbicos normalizados de biometano a la red de gas natural», ha apuntado Mark Kornweibel, el socio distribuidor español de Weltec Biopower.

Según Kornweibel, el sistema de cogeneración existente, de 250 kilovatios, seguirá funcionando a pesar del cambio a la producción de biometano. Con ello, la explotación puede seguir cubriendo sus propias necesidades de electricidad, calefacción y agua caliente. Una vez finalizada la nueva instalación en el verano de 2021, Torre Santamaría podrá gestionar sus propias necesidades energéticas con materia prima propia.